Documental sobre el exilio de Octavio Getino, fue presentado en el BAFICI este fin de semana
El director Octavio Getino se encuentra exiliado en Lima en la década de los 70’, es así que a través de cartas, imágenes de archivo y la propia voz del protagonista, el documental, narra la experiencia del director en el exterior. Con apuntes casi biográficos, se recorre la vida del protagonista, desde su llegada al país de muy joven, hasta su regreso en la década del 80.
Crónicas de un exilio (Argentina, 2021).Dirección: Micaela Montes Rojas, Pablo Guallar. Guion: Micaela Montes Rojas, Pablo Guallar, Hernán Figueroa Galperín, Carlos Cambariere. Fotografía: Nicolás Mikey, Nicolás Coledani. Edición, Música: Carlos Cambariere. Sonido: Moltiestudio, Juan Molteni. Producción: Nicolás Cobasky, Nicolas Mikey, Hernán Figueroa Galperín. Producción Ejecutiva: Nicolás Mikey, Nicolas Cobasky. Compañía Productora: Palta Films. Nuestra puntuación: Muy buena
Historia
El documental empieza con las palabras de Getino apenas llega a Lima, Perú, para su exilio. Allí habla sobre la situación actual de ese país, que al igual que Argentina atravesaba un golpe de estado. Getino no puede parar de relacionar su viaje, con su llegada a la argentina en los años 50’, ya que su verdadera nacionalidad es española. Su familia debió escapar del país debido a las consecuencias de la guerra civil española y aquí, en Argentina, encontraron un lugar más seguro para vivir, así lo cuenta él mismo Octavio Getino y su hermana en el documental. Con su llegada al país y Perón en el gobierno, él y su familia, se sintieron a gusto en el lugar y desde el momento que Getino padre cuenta con trabajo, dado por el mismísimo Perón, la familia se vuelve peronista. El tono político se mantiene a lo largo del documental, debido a que el protagonista tiene una gran relación respecto a este tema.
Política y vida personal
Octavio Getino, comienza a involucrarse en temas sociales, tras un hecho que lo marcó para siempre: el golpe de estado a Perón en el año 1955 . De acá en adelante el tema político y social es presentado en forma cronológica, al igual que el lado personal del director: la relación con su hijos. Ellos mismos, mediante sus voces, nos van guiando a lo largo del documental, el cual se suma a las cartas, las imágenes de archivo generales y personales de la familia.
Creo que es este es el punto en donde reside el fuerte del documental. Por un lado mostrar la faceta de realizador, militante y el compromiso de Getino en cuanto a las causas sociales. Como por ejemplo, la realización de La hora de los Hornos junto al gran Pino Solanas, documental realizado de forma casi clandestina y en pleno gobierno de facto. Este no contó con estreno oficial hasta el año 1973, con el retorno de la democracia, pero sí fue galardonada, anteriormente, en varios lugares de Europa.
Por el otro lado nos encontramos con la ausencia del director como padre. Aunque sus hijos no le reprochan del todo, si es evidente la ausencia de éste en su rol paternal. Pero el amor que tenía por sus hijos se puede ver en la forma en que conservó (durante años) los dibujos, cartas y casetes de audio que estos le enviaban en su ausencia y que era lo que, de alguna manera, los unía. Así mismo lo afirma una de sus hijas al finalizar la cinta.
En resumen, el documental hace hincapié, en la memoria no solo social y política del país, sino la memoria personal. La elección de Getino para representar este tema, es más que acertada.