Netflix lo hizo otra vez, con Black Mirror. Ahora innovó en un nuevo formato de película. Estamos hablando de Bandersnatch, la película de Black Mirror que, apenas salió, automáticamente se convirtió en furor en las redes. Hay muchos memes publicados sobre la película, pero para hablar de ella, tenemos que saber qué es.
Black Mirror: Bandersnatch es una película dirigida por David Slade, que también dirigió el episodio 3 de la temporada 4 de Breaking Bad y varios capítulos de Hannibal, donde, en reiteradas ocasiones, el espectador elige la acción que va a realizar Stefan, el personaje principal interpretado por Fionn Whitehead, el cual pudimos ver previamente en Dunkerke, cinta del 2017. Una vez sabido todo esto, estamos listos para empezar esta aventura gráfica hecha película.
Si bien al principio es medio confuso, la historia se va transformando de a poco y van creciendo sus raíces y detalles que el espectador tiene que captar para poder seguir la historia. Historia la cual nos pone en la mente y vida de Stefan Butler, un joven programador que decide llevar su próximo proyecto a una empresa desarrolladora de videojuegos, donde conoce a Colin Ritman, un desarrollador experimentado. Hasta este punto, el espectador tiene que tomar pequeñas decisiones para seguir la historia. A partir de este punto, cada decisión tiene su consecuencia más tarde.
Estas consecuencias son pagadas por el protagonista, poniéndolo cada vez más incomodo con su vida. Este precio lo construye el espectador/jugador, al cual, la película le ofrece cierto poder y libertad en cuanto a qué quiere ver y cuándo lo quiere ver, un efecto parecido al «On Demand». Ahora, el poder es algo que toda persona quiere tener hasta en las más mínimas ocasiones, y esta sensación de elegir está presente casi siempre a lo largo de la película -sensación que solamente podemos encontrar en videojuegos, y que, de repente, la encontremos en una película, es algo muy significativo y original-.
Pero la película no se queda ahí, y es que la misma posee muchas características que la hacen casi única, como el hecho de que tiene más de 10 finales, los cuales son posibles gracias a las diferentes combinaciones de decisiones que se pueden tomar. Esto nos hace complicado imaginarnos la estructura del guión o los guiones. El hecho de que tenga muchos finales y situaciones, nos hace pensar que tenemos en frente una historia muy rica y extensa, cuando en realidad, no es tan así.
En muchos casos, la historia pasa desapercibida, el espectador le suele dar más énfasis e importancia a las decisiones que toma en ese pequeño contexto en el que se encuentra -muchas veces sin importar la integridad física y/o emocional del personaje principal-. Al fin y al cabo, el espectador va a estar más interesado por lo que elige, que por seguir el hilo de una historia a la que no se le da importancia. De eso se trata Bandersnatch, de la libertad y el poder del espectador al “construir su propia historia”, haciéndolo gozar de un nuevo formato casi revolucionario.
El formato de Bandersnatch lo hace resaltar de las demás creaciones tanto de Netflix como de Black Mirror independientemente, y restaura una nueva forma de percibir e interactuar con un elemento audiovisual con el que antes no se interactuaba: el cine. Este proyecto nuevo de Black Mirror presenta algo original e innovador, donde el espectador se entretiene de una diferente forma con una película.
Como te dijimos antes, Black Mirror: Bandersnatch posee más de 10 finales, pero en este grandioso esquema hecho por el usuario @Avengerscomic en Twitter nos muestra todos los finales posibles con todas las variaciones de decisiones, un verdadero trabajo.

