Crítica de ‘The Quiet Girl’, película irlandesa de Colm Bairéad

The Quit Girl, película irlandesa
'The Quiet Girl' fue proyectada por primera vez en el 2022 en el festival de Berlín. Además, consiguió una nominación al Oscar como Mejor Film Internacional. Ahora, llega a los cines argentinos.
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The Quit Girl, película irlandesa
4.0 out of 5.0 stars

Desde Irlanda, llega la primera película de ficción del director y escritor Colm Bairéad, quien ya tiene en su historial cortos filmográficos y documentales. The Quiet Girl es un relato íntimo, sincero y silencioso pero que cruje fuerte por la relevancia universal que posee. Está basado en el cuento corto de la escritora irlandesa Claire Keegan llamado Foster.

Muchas veces caemos en la tentación de creer que el hogar al que venimos al nacer es sinónimo de refugio. Cuesta creer que no fuese así, pero lo cierto es que muchas veces esa vivienda no es más que un portal de la infelicidad. Hay hogares donde la disfuncionalidad se apropia y genera un temor en las almas que están en plena etapa de crecimiento. Los adultos que están a cargo no son más que seres complejos que inmortalizan sus dificultades.

En The Quiet Girl, la protagonista como dice el título de la película. Cáit es una niña silenciosa, calmada y discreta que se levanta todos los días en una morada que está tejida por la pobreza. La insuficiencia de sus padres y unas hermanas distantes; que moja su cama todas las mañanas como la encarnación de un grito de auxilio, aunque es inútil porque en ese hogar por más plagado de familia que esté, nadie pareciera apreciarla.

La película comienza con una campiña verde apoderándose del plano. Se escucha la vida en la naturaleza, sonidos que propalan suavidad, la cámara se desvía hacia la protagonista y nos revela que está cobijada entre el herbaje, casi camuflada, el epítome de su lenguaje está ahí, la calma de la tierra es su refugio, ambas se entienden, alguien es capaz de protegerla. Este primer plano tiene la grandeza de delatarnos que el tono melancólico será dueño de la historia. La cámara no se alejará del personaje para realizar un pacto con ella que asegura al espectador que el relato será la subjetividad de Cáit.

Luego la niña tiene que volver a su hogar y ahí nos enfrentamos con la hostilidad que debe soportar día a día pero su silencio tiene el poder de aturdir mucho más que la frialdad de esa madre sobrepasada y esa vivienda inundada de hambruna producto de las huelgas de hambre que transcurrían en la década de los 80 en Irlanda. El director tiene la majestad de no ser explicativo y se apoya en los reveladores detalles de su planos. Los personajes hablan en irlandés. Aunque el padre de Cáit muchas veces recurre al inglés, una metáfora de la barrera que impide la comunicación estrecha con sus hijos.

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Un día el padre de la niña la lleva a la casa de unos familiares a los que Cáit nunca antes había visto, desde ahí el relato comienza a abrirse porque las emociones empiezan a brotar y la película nos revela la esencia de la misma. Estos nuevos adultos en la vida de la niña le darán tiempo, espacio, y le enseñarán la magia en lo mundano: las tareas de la casa, desde pelar papas hasta darse un baño formarán parte de las hazañas de cada día. Pero sobre todo hay una gran inclinación en los planos hacia el alimento y el agua como símbolos del sustento de la calidez y el amor que nos facilitan el desarrollo, no olvidemos que el texto original se llama Foster que en inglés tiene el significado de alimentar.

La protagonista de la película The Quiet Girl toma agua

El film descansa en el trabajo excelente de fotografía de Kate McCullough, quien también fue la directora de fotografía de Normal People, que se encarga de mostrarnos el contraste entre el gris decadente del hogar natal de Cáit y la luz que emana el nuevo albergue de la niña donde a través de sus ojos sentiremos que los detalles tienen una profundidad de cuento de hadas.

La obra del director irlandés es un grandísimo manifiesto artístico de la importancia del amor como sustento en el crecimiento emocional y físico con una puesta en escena que pacta con la interioridad de su personaje y manifiesta lo que el presagio reza: la tranquilidad como escudo de supervivencia.

FICHA TÉCNICA

The Quiet Girl (An Cailín Ciúin, 2022). Dirección: Colm Bairéad. Guion: Colm Bairéad, Claire Keegan. Elenco: Catherine Clinch, Carrie Crowley, Andrew Bennett, Kate Nic Chonaonaigh, entre otros. Fotografía: Kate McCullough. Edición: John Murphy. Música: Stephen Rennicks. Duración: 1 hora 34 minutos. Nuestra opinión: Muy buena.

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