

Durante años se ha criticado al cine de superhéroes y cómics, al considerarlo solo una moda que en unos años desaparecerá. Algo parecido le sucedió al western,y estos géneros siempre son comparados de acuerdo a que un día ya nadie querrá verlos.
Los héroes son amados y odiados por todas partes del mundo debido a su falta de profundidad en personajes e historias, también el ser invencibles y con poca humanidad o que son simplemente perfectos salvando el día. Para ser honestos, sí, esa era la manera como eran presentados ante el mundo.
Actualmente podemos verlos un poco más realistas y con temas tabú que ni de broma se podrían mencionar en años pasados, pero, aun así, no es suficiente para la crítica cuando se llevan sus personajes a la pantalla grande. Son muy entretenidas sus películas, pero casi nadie las considera como buen cine.


Este año, un largometraje de este tipo fue nominado al Óscar como mejor película: Black Panther. Ni las trilogías de Batman, de Nolan o Logan -que han sido consideradas de las mejores del género-, nunca fueron consideradas de tal manera. A lo mucho por guion, actuaciones y categorías técnicas.
Ahora que por fin se ha logrado, demasiadas personas no están de acuerdo con ello, no porque sea basada en cómics o que la academia trata de ser políticamente correcta. Otros dicen que simplemente no es tan buena historia. Pero alto ahí, es la que mejor puntuación tiene en sitios especializados de todas las películas de Marvel Studios. Entonces, ¿quién está mal?
Mucha gente se sintió identificada con lo que fue a ver, y encontraron un mundo en el que se les permite sentirse parte de un movimiento social -algo que no todos podríamos entender-, y es que la comunidad afroamericana por fin pudo ver un blockbuster basado en cómics, dirigido principalmente a ellos, teniendo un mega éxito tanto en critica, como en audiencia y también en premiaciones.


Es una historia con trasfondo político, donde una sociedad vive alejada del mundo exterior, pero con identidad propia. Nos lleva a un debate moral, por ejemplo, el simple hecho de no poder ayudar al mundo exterior, sabiendo los tesoros y avances tecnológicos que tienen -cosa que el personaje T’Challa comprende mejor que su padre, ya que nunca quiso que Wakanda se abriera al mundo-.
Es la más realista en su argumento y eso la hace a un lado en cuanto a historia de Infinity War. Por esto, Disney se centró más en promocionar Black Panther, que en la más reciente entrega de los Vengadores, -la película más esperada del 2018-. Siendo así, por eso solo logró estar nominada en una categoría y técnica.
Black Panther rompió una brecha que nunca antes se había logrado, dándole más atención a los héroes que nacieron en las historietas. Debieron hacerlo hace mucho tiempo con otros personajes, pero es mejor tarde que nunca, y estamos en el aquí y ahora. Probablemente no gane, pero es un avance para futuras entregas para los superhéroes.