Esta es nuestra crítica de ‘Tron: Ares’ película de Joachim Rønning con Jared Leto y Greta Lee.
En esta tercera entrega de la saga de Tron, un sofisticado programa llamado Ares es enviado desde el mundo digital al mundo real en una peligrosa misión. Marcando así, el primer encuentro de la humanidad con estos seres. Esta franquicia es como ese hijo de una familia cuyos padres esperan mucho de él depositando más expectativas de las que puede cumplir. La primera película se esperaba que fuera un éxito al nivel de Star Wars, pero terminó quedando muy por debajo. Incluso Tron: Legacy, que tuvo un éxito decente, no fue la más taquillera del estudio ese año. 15 años después de la última entrega y con un futuro incierto para la franquicia, llega Jared Leto como protagonista y productor con el objetivo de adaptarla a los tiempos actuales y explorando los avances de la inteligencia artificial.
Cualquier admirador de la franquicia seguramente espere este regreso con ansias. Tron tiene un concepto tan increíble que podría aprovecharse mucho mejor en manos de buenos guionistas o directores, como se vio en la excelente serie animada Tron: Uprising (2012-2013) que fue finalmente cancelada. En ese sentido, Tron: Ares cumple parte de esas expectativas de manera aceptable.
La nueva entrega se adapta bien a los tiempos actuales, donde la inteligencia artificial es centro de debate y genera diferentes puntos de vista. Esto se refleja en la protagonista, que mira con optimismo esta tecnología y la respeta tanto como a las personas; a diferencia del antagonista, que solo piensa en beneficios personales y ve a los programas como simples servidores. Es una idea simple y efectiva, que no se complica y va directo al grano en su premisa.
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El planteamiento de la película es sólido, pero su ritmo es el principal problema. Arranca con fuerza situando al espectador en el contexto actual de la empresa Dillinger y presentando bien a los nuevos personajes. Pero, avanza demasiado rápido y no se toma el tiempo necesario para desarrollar a algunos secundarios ni para profundizar en el dilema tecnológico que propone. Con un menor ritmo la conexión emocional con los personales y la historia sería otra cosa.
Ares es un protagonista interesante, especialmente por no estar directamente vinculado con los originales y ser una creación del nieto de Dillinger, personaje de la primera película. Jared Leto entrega una actuación sólida y logra buena dinámica entre personajes con Eve Kim, interpretada por Greta Lee.
En cuanto a la producción, que siempre ha sido el sello distintivo de Tron, esta película no decepciona. Las visuales son impresionantes, con efectos digitales de primer nivel y secuencias de acción espectaculares. La estética de la saga sigue siendo inconfundible, y aquí se respeta ese legado tanto en el diseño del mundo digital como en los vehículos y el vestuario.
Por otro lado, el fan de Tron va a disfrutar las múltiples referencias a las entregas anteriores y las apariciones de actores clásicos como Jeff Bridges, que ya había sido anticipado en el tráiler. La música de Nine Inch Nails es otro punto alto: logra igualar la magnitud del soundtrack de Daft Punk en Tron: Legacy. El tema As Alive as You Need Me to Be destaca especialmente.
En conclusión, aunque la película Tron: Ares tiene algunos problemas de ritmo y desarrollo de personajes, pero representa un regreso decente para la franquicia y ofrece mucho en términos de espectáculo visual, música y acción. Es una película que mantiene vivo el espíritu de Tron y deja la puerta abierta para un futuro más prometedor si la película resulta en un exito en taquilla.
3.5/5 = Buena